Su punto de partida se encuentra en el municipio de Haro, continuando por un singular recorrido coincidente con el Camino de Santiago. Siguiendo el Camino de Arrauri, llegamos a Anguciana. Desde aquí se continúa hasta la localidad de Cihuri, a la que se accede a través de su barrio del Priorato. En ella, tras cruzar su inconfundible puente, paseamos junto al río, hasta llegar a Casalarreina, municipio al que se accede a través de su puente del siglo XIX sobre el río Oja. Aquí en Casalarreina, el Sendero del Vino toma la carretera N-232 para llegar hacia un camino rural que lleva de nuevo hacia el Camino de Santiago y conduce de vuelta a Haro, completando este recorrido circular de 22,5 kilómetros.

Este Sendero del Vino tiene su punto de partida en Haro y finaliza en Casalarreina, trascurriendo en sus casi 16 kilómetros por los municipios de Gimileo, Ollauri, Rodezno y Zarratón.

Comenzando el recorrido en Haro, a través de una calzada paralela a la N-124 se llega a la carretera de Gimileo. En este municipio es imprescindible visitar su Mirador sobre el Ebro, desde el que admirar, entre otros espacios, los Sotos, espacio protegido incluido en la Red Natura 2000. Continuando el recorrido por la carretera N-232 se llega a la localidad de Ollauri, donde desde su ayuntamiento se sigue un camino que conduce al siguiente municipio del sendero: Rodezno. En este municipio cabe destacar, sobre todo, su barrio de Bodegas que aporta al sendero un atractivo enoturístico añadido. Tras cruzar el pueblo y siguiendo la LR-311 se llega a Zarratón, donde se continúa por la LR-111 hasta llegar a Casalarreina, final del sendero.

Este Sendero del Vino, con una distancia de 8,5 kilómetros une las poblaciones de Casalarreina y Tirgo. La primera, se ubica en la unión entre el río Oja y el río Tirón, mientras Tirgo se encuentra rodeado por el cauce del Tirón. En concreto, el sendero discurre por la ribera del río Oja para posteriormente rodear la zona a la izquierda de éste, perteneciente al municipio de Casalarreina, y dirigirse hacia Tirgo.

El sendero recorre paisajes propios de la ribera de ambos ríos, amplias zonas de cultivo, sobre todo de cereal, y viñedos. Perfectamente acondicionado para su recorrido a pie o en BTT, es una opción idónea para conocer tanto los parajes riojanos como el patrimonio de ambos municipios por parte de todos los públicos.